Diario de un aventurero en chinataun taun taun.

Wednesday, March 22, 2006

Trancazo


El viernes pasado tuve que volver a renunciar a mis planes de partir hacia Hong Kong a primera hora por motivos ajenos a mi voluntad. Los de la escuela me están tramitando un visado de trabajo, tarea que debe llevar mucho ídem porque ya llevan tres semanas pidiéndome que les deje el pasaporte para hacer el papeleo. Aunque no encuentro romántica idea de vivir como un clandestino, accedo a prestárselo entre semana a cambio de que me lo devuelvan los fines de semana para mis escapaditas. Por desgracia, el viernes la secretaria encargada del asunto (sí, la misma a la que tuve que presentar pruebas de la existencia de la UPV) no dio señales de vida hasta las once, lo que arruinó mis intenciones de plantarme a las 12 en un cine de Kowloon, a tiempo para la primera sesión de V de Vendetta, una de esas superproducciones hollywoodenses basadas en cómics que tan ansioso suelo estar por ver, y cuyo estreno no estaba dispuesto a perderme, especialmente porque vosotros tendréis que esperar hasta el 7 de abril para verla en xi ban yá (que es como dicen España aquí). Así que me tuve que conformar con ir al pase de las dos y media, una auténtica p****ada porque la sesión anterior tenía un descuento del 50%. La película es fenomenal y os la recomiendo encarecidamente (aunque sería una pena que no la vierais en versión original), pero salí de la sala tiritando porque cometí la imprudencia de ir en camiseta y pantalones cortos, obviando el hecho de que Hong Kong es famoso por la regulación de los aparatos de aire acondicionado, que convierten todo recinto cerrado en un frigorífico industrial. Pagué mi imprudencia con un trancazo que todavía arrastro. Pero no fue eso todo lo que me traje de Hong Kong, porque regresé a la galería comercial Causebay y esta vez sí, las tiendas de cómics estaban abiertas. Clark’s y Metrocomics se llaman, y no son más que dos pequeños trasteros llenos hasta la bandera de cajas repletas de cómics importados desde Estados Unidos entre las que me movía como un muerto de hambre ante el mayor banquete que podáis imaginar. Feliz como unas pascuas, pero abrumado e indeciso al no saber por dónde empezar. Terminé comprando una revista informativa para ponerme al día y diez tebeos cuya lectura no he sabido racionar adecuadamente.
A la vuelta empecé a notar las señales de mi inminente catarro y me puse más paranoico de lo habitual al rellenar el formulario médico que hay que entregar en la aduana, donde hay que admitir si padeces alguno de los síntomas que se especifica (migrañas, tos, mocos, fiebre, vómitos…). Gracias a Crom, el personal de las batas blancas no reparó en mí y me libré de ser puesto en cuarentena.
No he tenido más que un poco de moquera y tos, pero he preferido tomarme un fin de semana de descanso y no salir de juerga, aunque el sábado tuve una cena con unas guiris para la que intenté cocinar una genuina tortilla de patata con el chorizo de la tía Julia que me traje de Bilbao. Como la sartén que compré era tan antiadherente como el papel matamoscas, sucedió lo inevitable y terminé preparando el revuelto semichamuscado de patatas y chorizo que podéis observar en la fotografía. Para mi sorpresa, la cosa estaba comestible e incluso resultó ser más sabrosa que lo preparado por las damas, más legas que yo en lo que a cocina se refiere, observo.
Además del chorizo y el jamón de bellota, también vine provisto de un pequeño botiquín que consta de aspirinas, Gelocatil, Fortasec, Fave de Fuca (un “regulador intestinal” que viene en una caja de sugerente color verde pirrilera con un bonito dibujo de dos palmeras entrelazadas), y Ciprofloxacino (unas pastis que por lo visto son buenas para las infecciones de garganta, oídos, vías respiratorias y genitourinarias, abdomen, sangre, huesos, articulaciones, piel y tejidos blandos, y vesícula biliar –incluyendo fibrosis quística y carbunco-), pero se me olvidó el Frenadol, así que le pregunte a mi profesora de chino a ver si tenían algo parecido y ella me explicó cómo pedirlo en la farmacia. El medicamento que me he agenciado se toma de la misma forma que el Frenadol (una caja de sobres con polvos que hay que tomar tres veces al día hasta que se acaben), pero así como el segundo tiene un color amarillo pálido y sabe a refresco de naranja, su equivalente chino adquiere el color de la caja de Fave de Fuca cuando se disuelve y su sabor no es mejor que su apariencia. Ya sea porque es eficaz o por el efecto placebo, la verdad es que me encuentro mucho mejor, gracias.

16 Comments:

Anonymous Anonymous said...

Jo, Tino. Cuídate. No será gripe aviar, ¿verdad? No comas posho.

2:47 AM

 
Anonymous Anonymous said...

Cuidate mucho, Martín.

No vayas a cines con aire acondicionado. Ojo con las versiones originales, que están sin vacunar y ya ves lo que pasa.

Un abrazo.

6:27 AM

 
Anonymous Anonymous said...

Cine y comics, y mocos!!!. Tus sigue cocinando asi de bien, no saben esas todavia el hombre que tienen entre manos. Ya me alegro que te recuperes del trancazo. Por aqui hemos estado todos griposos tambien. Cuidate. 1 abrazo.

3:47 PM

 
Anonymous Anonymous said...

La tortilla tiene toda la pinta de un plato tipico chino.Cuidate mucho ese catarro.Mosus

9:00 PM

 
Anonymous Anonymous said...

cuidate marto! aunke con el alijo de drogas legales ke has conseguido pasar no hay miedo. Por cierto, como se te ocurre darles tortilla de chori palacios a unas francesitas!? despues de la cena cada uno a su ohera no? no me lo digas, ke artista.

9:21 PM

 
Anonymous Anonymous said...

Martin, no tiene nada q ver con tu tortilla (espero), pero creo q te interesará saber q ETA ha declarado una tregua permanente a partir de las 0:00 del viernes 24. Ya nadie se fia demasiado, pero hay un cierto aire de esperanza. Ya se verá.

12:55 AM

 
Anonymous Anonymous said...

La tortilla tiene su arte, no la hace bien cualquiera. Esmérate y podrás montar una franquicia de teletortilla que hará temblar a los negocios de comida rápida a domicilio en toda China. No obstante, si llegaran a sospechar que el chef está acatarrado, la competencia no dudaría en denunciar ingredientes nocivos al asimilar el huevo poco hecho con un esputo. Vigila esa moquera.

1:48 AM

 
Anonymous Anonymous said...

Te vas a China y te pierdes la convulsíon politica mediatica del milenio....que suerte tienes macho.
Fijate que ha habido gente que ha brindado con champan. Parece que hay que darles las gracias a los de la boina. Tu sigue disfrutando en oriente que aqui no te estas perdiendo nada.

6:33 PM

 
Anonymous Anonymous said...

"Dar la vuelta a la tortilla" ¡Que juvenil impulso!
Por aquí, con un revuelto que se pudiera tragar, todos tan contentos.
Cuidate.

6:14 AM

 
Anonymous Anonymous said...

en el país del aloz no ibas a hacer pa ella pa ellas

7:14 PM

 
Anonymous Anonymous said...

o mucho dura el trancazo
o la indigestión de la tortilla

3:11 AM

 
Anonymous Anonymous said...

o mucho dura el trancazo
o la indigestión de la tortilla

3:11 AM

 
Anonymous Anonymous said...

o mucho dura el trancazo o es indigestión de la tortilla

3:13 AM

 
Anonymous Anonymous said...

Este blog esta cayendo en el abandono, quizá en la misma medida en que su creador esta siendo colmado de bendiciones por las degustadoras de tortillas (dejemoslo así). Siento la inmensa pena de tu extravío...

7:51 PM

 
Anonymous Anonymous said...

esta tortilla está fósil. Haz otra nueva. Como canal cocina este blog no es muy atractivo.

10:32 PM

 
Anonymous Anonymous said...

esta tortilla está fósil. Haz otra nueva. Como canal cocina este blog no es muy atractivo.

10:32 PM

 

Post a Comment

<< Home